Para Asunción
En la exhibición de Moctezuma II en el Templo Mayor no está permitido tomar fotos con flash.
Hice entonces una película y aislé esta muy viva piedra rugiente que formó parte del Palacio Virreinal en el siglo XVI y que el tiempo convirtió en escombro para ser rescatado secular y recientemente.
Trae su luz y su prohibición y parece flotar en el tiempo -que es lo que ha hecho, al fin y al cabo. Ahora dialoga con las piedras aztecas en un discurso que comienza en náhuatl y termina en castellano y que no ha terminado de decirse. (MGE)