La alondra se esconde
del árbol aquel,
un árbol dorado
con hojas de miel.
¿Y por qué se esconde
del árbol aquel,
si ofrece al que pasa
sus hojas de miel?
Porque no se cree,
mi niña Isabel,
que un árbol dé hojas
tan bellas, de miel.
La alondra sostiene,
mi niña Isabel,
que el árbol la engaña
y que es de papel.
La alondra se aleja
del árbol aquel
y quiere que el viento
la lleve con él.
(C) Antonio García Teijeiro
Versos con alas
Voz. María García Esperón
Música: Yanni
MMXI