No sé si heredarías la noche de mi pelo, ese bosque iluminado que tú trenzas a veces, o aquel gesto almendrado al borde de mis ojos. La sonrisa no es mía, pero me gusta verla partir de entre tus labios como una golondrina sin dueño y sin remite que la vuelva a su sitio. Hemos pasado juntas un tramo del camino, tú con tus pasos nuevos yo con mis viejos usos pero sintiendo las dos bajo tu piel y la mía el río de nuestra sangre fluyendo al mar. El mar: ese puente que nos devuelve -nubes- hacia el futuro.
(C) Elba García De su libro El río de la vida, 2005. (España) Voz: María García Esperón (México) 2009