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Amor es camino: miravoz de la poesía de Luis Rius



Transterrado y con conciencia de trastierra, Luis Rius vivió solamente 54 años. Nació en Tarancón en España en 1930 y murió en la ciudad de México en 1984. Dejó una obra trémula y perenne, de muerte sembrada y verdeante, donde el amor siempre fue camino. MGE

 Amor es camino 





Porque el sueño no tiene la piel tuya
no he podido del todo amar tu sueño
(tu sueño sigiloso en la vigilia
que viene sin llamarlo y que me lleva
con él, lejos de mí, o el que, dormido,
entra de noche a oscuras en mis ojos
a despertarme el corazón).
                                       ¡Quién sabe,
si yo pudiera acariciar tu sueño
como a ti te acaricio con mis manos,
si no lo amara a él más que a ti misma!
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Nebulosa Cabeza de caballo, de Wilson Pérez Uribe


El poema lo escribí en mayo del año 2013, observando la constelación de Orión declinar en el occidente, ya cuando entraba la noche. La nebulosa cabeza de caballo o IC 434 O Bernard 33, se encuentra ubicada en el extremo izquierdo del cinturón de Orión, adquiriendo, en su materia de polvo y gas estelar, la forma de un caballo encabritado. Wilson Pérez Uribe.


La hora de la penumbra
hace música en el viento,
y mientras en el oeste
la delgada luna desciende con el ocaso,
te diviso, solitario corcel,
vagar en las innúmeras praderas del universo.
Y luego de hallado el poema
con olor a verbo y a infinito,
acaricio la curvatura cósmica de tu cuello
dibujado con tersura en un atlas
de pergamino celeste que reposa en mis manos.
Ah, qué difícil es meditar a solas,
y saber que tú sólo has nacido
de una cascada sideral de antiguas estrellas;
y que yo, no queriendo haber existido,
me debo resignar a ser
esa leve suerte en el Paraíso:
la piel, la carne, un labio...
esa extraña melodía al respirar.

(C) Wilson Pérez Uribe 




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Me pongo entero en el poema, de Santiago Montobbio



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ME PONGO ENTERO EN EL POEMA.
A él me doy, con absoluta entrega.
A mi arte una honestidad profunda y radical
lo sustenta. O, como pensaba antes, de chico
(y es lo mismo), es mi vida quien da autoridad a mis palabras,
su silencio. Su cultivo secreto, añado. Toda mi vida
sustenta cada una de mis palabras, está
detrás de ellas. Son modos míos de decirlo,
de ahora uno y otro viejo. Pero yo
me pongo entero en el poema, a él me entrego.
Entre mis poemas y yo no hay diferencia ninguna,
pensaba también de chico, en otro sentir que vuelve.
Soldado del arte, antes y ahora batallo
o cabalgo o palabras enlazo
con absoluto amor y desde mí.
Sólo quería decir esto, aunque haya usado
varios modos de decirlo. Basta uno.
Por algo los principios son siempre lo más cierto.
Me pongo entero en el poema.

20 marzo 2009

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Cifra del olvido, de Wilson Pérez Uribe




CIFRA DEL OLVIDO

Puedes olvidar el relámpago, el terror y la lluvia;
el sol que te ha hecho hombre de hábitos;
dos cazadores de oro pálido en los bajíos del Monte Kenia;
el ruiseñor oído hace tres siglos;
cierta puerta, cierto cristal y algún arabesco;
un calendario medieval que te habrá regido el sueño.

Puedes dejar atrás árboles y cisternas que obran tu sosiego;
un errante cometa o el acto de las células.

Pero no olvides el instante obrado
por un dios geómetra ni la materia que te puebla
ni los altos parpados del cielo ni tu solitaria alma
cuya espera es eterna como la fruta a tu hambre.

Jamás olvides que has sido vaguedad
de nueva tierra y molécula de otro tiempo.


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Presentación del libro Corazón de plata, de Kyra Galván, en Un lugar de la Mancha



El próximo miércoles 2 de julio, tendré el honor de presentar la espléndida novela Corazón de plata, de la escritora y poeta Kyra Galván.

La cita con la intriga, el suspenso, la Historia y la voz del cantante Gabriel Mijares es en Un lugar de la Mancha (Esopo 11, Colonia Chapultepec Morales) México, D.F, a las 19 horas.

Una oportunidad de oro para escuchar de labios de la propia autora las claves de la vida del maestro de la plata, el norteamericano William Spratling, que desde la bella y misteriosa ciudad de Taxco, contribuyó a forjar el rostro polifacético del México del siglo XX.

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Ecos de ayer en el Centro de Cultura Antiguo Instituto Jovellanos, Gijón

Presentación y recital poético-musical del libro Ecos de ayer, de

FERNANDO ÁLVAREZ BALBUENA 

Centro de Cultura Antiguo Instituto. Sala de conferencias. Jueves, 19 de junio, a las 20 horas





Fernando Álvarez Balbuena (Gijón, 1933) es doctor en Ciencias Políticas y Sociología, licenciado en Derecho y diplomado en Óptica y Optometría, empresario y fundador y vicepresidente de la Sociedad Económica de Amigos del País de Avilés. También es conferenciante y articulista en revistas especializadas y en prensa diaria, investigador y escritor. , autor de los libros Historia de la Gloriosa Revolución de 1868; Tres ensayos sobre sociología política —Maquiavelo, Unamuno y Armando Palacio Valdés—, Figuras y paisajes políticos de la España del siglo XIX; Roma, del paganismo al cristianismo y Masonería, Cortes de Cádiz y otros mitos de la Historia de España. Como poeta ha publicado Marea interior, Ecos de ayer y, junto con los también poetas Juan García Campal y Juan Martínez Valdueza, Tres voces, tres mundos, de reciente aparición.

Presenta: Antonio Merayo
Recitación y música: La Caravana del Verso (Cristina Rudolph, Nieves Iglesias, Rodrigo Alperi y Joaquín de la Buelga)
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Un poema en sepia de Enrique Pérez Díaz


Sepia es el color del tiempo pasado que siempre tiende a ser mejor. 
Sepia es el recuerdo y también el trasluz de la esperanza. 
MGE



Sepia es mi amor, es mi recuerdo.

De un desvaído sepia visten hoy mis sentimientos.

Hay olvido, silencio y duda en sepia.

Hay un grande silencio

que me acecha

en cada contorno de mi alma,

desesperada y muda,

porque bien sabe,

desde el sepia más profundo,

que nunca,

jamás,

escuchará esa palabra tuya

tan ansiada como sepia.

En el mar de un sepia

navegan mis sentidos,

extintos de bogar entre olas grises.

En la prisa de un suspiro

que se esconde y me cabalga,

guardo un sepia recuerdo de aquello que no ha sido,

quimeras vanas como un sueño sepia,

mientras tú, ausente y tan cercanamente lejos,

te cubres de silencios cuando yo,

desde el trasluz de la esperanza,

anhelo vestirme del olvido…


Sepia es mi amor en la voz de MGE


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Poesía de Wilson Pérez Uribe en La Tagua, de Medellín


Wilson Pérez Uribe en una reciente participación en la Universidad de Antioquia.

La revista  LA TAGUA de la ciudad de Medellín, Colombia, publica por quinta ocasión la poesía de Wilson Pérez Uribe.


Dónde el amor de seda
y el suspendido instante, eterno, de existir.
Dónde si no en tus ojos, que escriben
en letras de ámbar la duración de la tarde.

****

Ser río que fluye en ocaso hacia el mar,
nube de tersa e iridiscente curvatura,
inocente alquimia de la primera estrella.
Ser en las vagas y silentes formas que perduran.

Wilson Pérez Uribe. Colombia


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Presentación de libros en la Casa de las Américas, La Habana


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Flor y canto para Copo de Algodón en el Museo Mural Diego Rivera

Frente a los colores y genio de Diego Rivera

Por segunda vez hemos presentado la versión narrativa y música del Concierto Escénico Copo de Algodón, que el Maestro David García ha compuesto como un homenaje a nuestra raíz prehispánica y que es un canto de esperanza y amistad.

El Maestro David García

Con la participación de Giuliana Vega, dando vida a los títeres Copo de Algodón, el Pequeño David, la Señora Mexica e Isabel Moctezuma y la voz incomparable de Mariana Lorenzo y sostenidos siempre por Paola en los controles técnicos,  otra vez pudimos vivir las emociones de la Historia.

Mariana Lorenzo nos hizo vibrar con su maravillosa voz

Con Adriana y Citlali

Gracias a todos los amigos que nos acompañaron y que entonaron al final las Mañanitas para David, por su cumpleaños. Gracias a Paulina y Rebeca, de Ediciones El Naranjo, que nos apoyaron con su inteligencia, su juventud y su sonrisa. Gracias a Adriana, hermana en este camino de amor por la cultura azteca, a Citlali, quien pronto escribirá los cuentos, a Elli y Carlos y Annelli y Aili por estar con nosotros otra vez. Los amigos nuevos, como Denisse, historiadora del arte, y su familia y Pamela, estudiante de Turismo, quien estaba muy emocionada por poder recrear a través de la palabra la belleza infinita de la Gran Tenochtitlan.

Tenemos todo: flores, cantos y amistad


Quetzalcóatl y Xoquiquetzal y Tláloc y Coatlicue y Xochipilli, Nuestro Señor de los Cantos, también estuvieron con nosotros tenuemente dibujados y sonrientes en su evocación. Como estuvo el gran Diego Rivera a través del imponente Mural que atestiguaba nuestro amor por las flores y los cantos mientras recordábamos que hace muchos años, en una ciudad sobre una laguna, existió una niña llamada Copo de Algodón.

Con Pamela

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Corazón de plata, de Kyra Galván



Kyra Galván deja claro en su segunda novela lo que ya había planteado en la primera: que pertenece a esa estirpe de narradores que son un poco alquimistas y un mucho detectives y que saben rastrear entre las capas del tiempo los hilos de la verdad.

Corazón de plata sucede a Los indecibles pecados de Sor Juana. Temáticas completamente diferentes en las que esta escritora que también es poeta deja la marca de su genio. De su magia. Posee el poder de hablar con los muertos y de hacer hablar a los muertos. Desciende directamente de Homero, a quien cita en el epígrafe de Corazón de Plata y a quien le agradece su Odisea al final.

Transitar por sus páginas es navegar sobre las aguas de un río inteligente y vertiginoso. Navegar por el río de sus letras es convertirse en el mismo río, tan heracliteano como ella y su literatura: Somos y no somos. El pasado puede transformarse en virtud de su logos. De su genio. De su magia.

Somos la soberbia figura de William Spratling, el versátil artista norteamericano asentado en Taxco, activo paciente de destino mexicano eterno en la plata de sus diseños. Somos Vivian García-Diego, la protagonista. Somos la lánguida Jackie Kennedy y su tocayo y marido Jack, el descendiente de irlandeses que sería Presidente de Estados Unidos. Somos Diego Rivera pintando genialidades y rascándose la cabeza para saber cuánto cobrar por ellas. Somos gringos y mexicanos y suicidas y quinceañeras y homosexuales.

Y somos también curiosidad, impaciencia, morbo, virtud y pecado, lectura, al fin y al cabo. Kyra nos mantiene sobre el filo de sus letras y nos pone al borde de la revelación. De la iniciación. Olemos sangre y vislumbramos la posibilidad del amor. Hojeamos el libro y abrimos los ojos intentando recoger todas las intenciones de las letras. Estamos tomados por la narradora que, como la hábil fabuladora del sultán suspende el hilo de su relato para hacernos apetecer más vida y entrever posibilidad de muerte.

El duende, dijo García Lorca, solo aparece cuando ve posibilidad de muerte, cuando sabe que esta ronda su casa. Este de Kyra Galván es un libro enduendado, telúrico, surcado por esas energías subterráneas que nos toman desde las plantas de los pies, que nos sacuden e increpan, que nos muestran la realidad develada. Su brillo nos hiere las pupilas. Su brillo nos ciega, como a Everardo y es entonces que comenzamos a ver realmente. A entender. A atar los cabos. A descifrar el deslumbrante laberinto.

Kyra nos convierte. Nos signa y nos resigna. Resignados como Vivian, queremos saber. Vamos hacia el origen y con ella descubrimos miseria humana. Pero también belleza y paisajes y pueblos coloniales enclavados en purísimas montañas y la blancura indescriptible de la plata. Historia, leyendas, mitos y chismes. Murmullos, olores, pistas. Llaves y diarios. Enchiladas y café. El erotismo como una afilada herramienta de conocimiento. Un laberinto de vida cifrado en las callejuelas de Taxco, que como ciegas serpientes buscan su origen.

Una investigación documental y de campo extraordinariamente meticulosa vertebra la novela. Kyra Galván ha pisado tanto la casa como el rancho Spratling y conoce la Casa Borda de Cultura como la palma de su mano. Ha escrutado en todas las direcciones ensayos y artículos sobre la familia Kennedy. Sigue a milímetro el viaje de bodas mexicano de la pareja de Camelot en 1953. Remonta el curso del río de la información. Reconstruye la vida mexicana en la década de 1950. Rastrea. Comprueba sus fuentes. Pero por sobre todo, ejerce su don supremo, que es la mirada, o mejor dicho, la videncia del escritor. Esa intuición, ese leer desde dentro las situaciones, los objetos, los sujetos. Ese saber, porque sí, qué estaba pensando Frida cuando le lleva la comida a Diego; qué conjetura Jackie antes de decidir si viaja de día o de noche a Acapulco, el peso infinito de la más leve idea, las consecuencias interminables de la ocurrencia más banal.

El ejercicio de la literatura se nos entrega a través de este libro como un sacrificio, en el sentido etimológico de hacer sagrado. Le restituye a la realidad sus dioses y sus peligros, sus necesarias aunque dolorosas emociones. Los personajes caminan hacia su propio mito. Y nosotros con ellos, porque saben mirarnos a los ojos. Como nos mira Everardo el ciego, como Kyra Galván nos mira desde su corazón de plata. (María García Esperón)


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David García: un corazón tan grande como México


David García Hernández, pianista y compositor

David García Hernández

Un corazón tan grande como México

Fotos: Cortesía de Ana Laura Delgado

Por María García Esperón

Entrar en la atmósfera vital del compositor y pianista mexicano David García Hernández es ingresar en las páginas de un libro iluminado. Un libro que además expresa a través de una música deliciosa el latido de un corazón tan grande como México. La actividad incesante de este artista lo ha llevado a erigir en poco tiempo delicados monumentos que surgen de su piano para entregarnos sentido, alma, flores y cantos. Desde sitios emblemáticos: el Castillo de Chapultepec, el Museo del Arzobispado, el Museo Mural Diego Rivera, el Museo Nacional del Virreinato en Tepotzotlán, David García emite su magia. Su público sale ilusionado y orgulloso de ser mexicano, de tener esa sangre en las venas y esa poesía en el corazón. El próximo domingo 8 de junio, David García vuelve a ofrecer su creación incomparable en el Museo Mural Diego Rivera. Se trata de una versión del Concierto Escénico “Flor y Canto para Copo de Algodón”, presentado con enorme éxito el pasado 1 de junio en el Castillo de Chapultepec, y a propósito de este hecho cultural y artístico, el compositor nos ha regalado la siguiente entrevista.


David, ¿en qué momento sentiste que debías dar a conocer a través de tu música al personaje histórico Copo de Algodón?


Fue un momento muy especial que dio inicio cuando supe del lanzamiento del libro titulado "Copo de Algodón" de María García Esperón, editado por El Naranjo. El día del lanzamiento adquirí un ejemplar y completé su lectura en menos de una semana. Durante este proceso me involucré con la lectura a tal grado que podía ver con claridad cada escena descrita en el libro y durante mis pausas de lectura iba al piano y empezaron a surgir las primeras notas que parecían estar dictadas con precisión desde esas imágenes que me provocaban una emoción inmensa. Durante uno de esos momentos tomé un teponaxtle que nos brinda predominantemente dos notas que llevé al piano y con estas notas fue que completé el tema principal. En las semanas posteriores fueron surgiendo otros temas cuando recordaba sucesos de la vida de Copo de Algodón y fue entonces que comprendí que era necesario compartir con el público tan interesante historia a mi manera, que es a través de la música.

El primer tema fue precisamente "Copo de Algodón"
Uno de los capítulos del libro que más disfruté fue el que se titula “Quiáhuitl”, que habla sobre un encuentro muy cercano entre Cuitláhuac y Copo de Algodón. La intensidad de las palabras plenas de romanticismo dieron lugar al "Tema de amor de Copo de Algodón" que es uno de mis favoritos de esta colección.

Ya que el Concierto Escénico "Flor y Canto para Copo de Algodón" es una realidad... ¿cuáles son tus sentimientos al respecto? ¿Qué sientes cuando ante audiencias numerosas interpretas tu música y compruebas las reacciones del público?

Mis sentimientos al saber que "Flor y Canto para Copo de Algodón" es una realidad son de satisfacción y felicidad plena de haber logrado concluir un proceso de producción que me llevó cuatro años desde que decidí dar a conocer la música dedicada a Copo de Algodón.
Esta producción ha sido el proyecto más retador con el que me he encontrado pues además de combinar la música con el canto y el teatro de títeres, fue necesario profundizar en el tema enriqueciendo mi lectura con otras fuentes para planear los detalles del mensaje que quería presentar al público infantil que sigue mi trabajo, mostrando una princesa mexica que nos invita a reconciliarnos con nuestras raíces mexicas y españolas, aprendiendo a valorar las virtudes y valores de cada una de ellas. Por otro lado fue muy enriquecedor profundizar en las características que pudo tener la música prehispánica para darle a cada tema la emotividad necesaria.

Encontrar la reacción del público en audiencias numerosas a lo largo de estas cuatro años, desde el júbilo hasta el llanto, han sido un motor que dio como resultado la primera presentación de esta obra el pasado 15 de Marzo de 2014 en el Antiguo Palacio del Arzobispado en donde comprobé el magnetismo de esta música que por comentarios de los asistentes pudieron comprender claramente la Historia de la Conquista de México a través de las notas musicales creadas con esta intención.

Cuéntanos del proceso creativo. ¿Cuál pieza vino primero? ¿Cuál después? ¿Cuál fue la última? ¿Sigues componiendo en torno a Copo o ya llegaste a la nota final?


David y Mariana Lorenzo,  intérprete del tema "Copo de Algodón"
El primer tema fue el principal y se titula "Copo de Algodón". Después de este tema surgieron otros como "La primera mirada" y "El collar de piedras finas". El último tema fue sin duda el que se titula "¡Tenochtitlán subsiste!", que es con el que cierra la obra y que provocó una increíble reacción del público que presenció su estreno para provocar que se pusieran de pie con una ovación de aplausos que provocaron muchas lágrimas de emoción.



Considero que el proceso creativo de las obras para Copo de Algodón se ha cerrado para pasar a la etapa de enriquecimiento en la que continuo trabajando para lograr un mestizaje musical entre el piano e instrumentos propios de una orquesta sinfónica, con instrumentos autóctonos. Actualmente tenemos grabados ya cinco temas en una versión demo de lo que será el disco completo con todas las obras musicales dedicadas a Copo.
Una característica importante de este proceso creativo ha sido que a diferencia de otros donde inicio con un borrador que va madurando y modificándose para llegar a su versión final, en este caso cada tema surgió de principio a fin sin requerir mayor modificación. Fueron momentos de inspiración musical en los que logré un grado de concentración tal que me llevó a crear temas con mayor dificultad técnica y que tuvieron como reto poder reproducirlos para el montaje de la obra.

¿Tienes alguna pieza favorita en este Concierto Escénico, la que haya dejado hablar más a tu corazón?

Aunque disfruto toda la obra, sin lugar a duda el tema donde dejo hablar a mi corazón con mayor libertad es el "Tema de amor de Copo de Algodón". 

He tenido oportunidad de escuchar, en la voz de Marisol Martínez, tu composición sobre la leyenda del ajolote ¡y me ha parecido la canción más hermosa del mundo! Esta serie dedicada a la fauna y flora de México... ¿se vincula de alguna manera con el mundo de Copo de Algodón? 

Hay un vínculo muy cercano, pues para mí es como entrar a detalle en el jardín que Moctezuma Xocoyotzin le regalara a Copo de Algodón y hacer un viaje por el entorno natural de la época que le tocó vivir.
En este nuevo proyecto que llevará por título "Cantos por la Flora y la Fauna de México" tendremos temas dedicados por ejemplo al Xoloitzcuintle, a la flor de cempasúchil, al teporingo, que es una especie de conejo propia de la zona volcánica que rodea a la Ciudad de México, y a la nocheztli que es mejor conocida como grana cochinilla, de la cual se obtienen colorantes con los que se tiñen hermosos tapetes en tierra oaxaqueña hasta nuestros días.
Si con Copo el objetivo ha sido fomentar el orgullo de ser mexicanos basado en el conocimiento de nuestros orígenes de sangre mexica fundida con española, con este nuevo proyecto la idea es fomentar el cuidado de lo que nos pertenece y representa la riqueza natural que nos brinda identidad ante el resto del mundo.

Además de compositor, eres también letrista. E introdujiste en Copo de Algodón la presencia de la lengua náhuatl. Cuéntanos cómo fue ese proceso.

Cuando hice la letra del tema "Copo de Algodón" en español, me pareció que un toque de originalidad que podía aportarle un valor adicional a la obra era la introducción de un fragmento en lengua náhuatl. Para ello me hice a la tarea de comunicarme con Ma. Rebeca Mendoza González y Gloria Guadalupe Gómez, profesoras del taller de lengua náhuatl de la Casa de Cultura de Azcapotzalco, quienes amablemente accedieron a brindarme su ayuda para lograr el resultado que ha sido muy bien recibido por mi público.

Estos son sin duda, tiempos interesantes. ¿Qué papel han desempeñado las redes sociales en el éxito de tus presentaciones?
 
El público orgulloso de tener esa sangre en las venas y esa poesía en el corazón
Las redes sociales han sido un pilar fundamental para el desarrollo de mi proyecto al brindarme la difusión a la que difícilmente podría tener acceso a través de radio y televisión comercial. Actualmente cuento con alrededor de 4500 amigos a través de Facebook, 245 suscriptores en YouTube y 600 personas que siguen mi página oficial que me brindan siempre la motivación, apoyo y promoción continua que ha ido multiplicándose como bola de nieve en México y otros países.



¿En qué lugares has venido presentando Flor y Canto para Copo de Algodón?

El concierto escénico se ha presentado solamente en el Antiguo Palacio del Arzobispado, y existe interés de varios foros y teatros localizados en la Ciudad de México, provincia y en Estados Unidos para realizar otras presentaciones. Estamos trabajando en ese proceso.
La obra musical se ha ido presentando mediante avances en foros como el Castillo de Chapultepec, la sala Hermilo Novelo del Centro Cultural Ollin Yoliztli, el Museo Mural Diego Rivera, entre otros.

¿Qué podrá disfrutar tu público en el Museo Mural Diego Rivera el próximo 8 de junio?

Lo más importante es que podremos disfrutar otra vez de la reunión de los artistas y creadores que dieron origen a "Flor y Canto para Copo de Algodón" a través de la narrativa de María García Esperón a quien admiro y respeto por su increíble sensibilidad y tu servidor con la música que nació después de leer su hermoso libro.

Tendremos otras sorpresas que enriquecerán la presentación, pero el compartir el escenario con María es algo que el público no se puede perder.
Compartiendo el escenario: David García y María García Esperón

¿Cuál es la "receta" para que las nuevas generaciones amen y disfruten tanto como tú la historia y las tradiciones de México?


Más que una receta considero que para que las nuevas generaciones amen y disfruten la historia y las tradiciones de México, necesitan conocerlas y vivirlas. Ante el proceso de globalización como el que estamos viviendo, es una misión de quienes trabajamos para la cultura y las artes el fomentar el interés por adquirir ese conocimiento y contribuir a que las nuevas generaciones puedan reconocer la enorme riqueza que existe en nuestra historia y que uno de nuestros atractivos más importantes está precisamente en nuestras tradiciones, que con sus aromas, colores, sonidos, sabores y texturas nos caracterizan y nos hacen únicos en el mundo.


Agradezco mucho la oportunidad para haber participado en esta interesante entrevista y reitero mi invitación a todo el público que gusta del trabajo artístico de María García Esperón y el de su servidor David García Hernández para acompañarnos el próximo domingo 8 de Junio de 2014 a las 14:00 en el Museo Mural Diego Rivera (Balderas y Colón s/n Centro Histórico)  entrada libre, y a visitarme en mi página oficial www.davidgarciahernandez.com.mx .
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Flor y canto para Copo de Algodón: un blog

Foto: Ana Laura Delgado

Flor y Canto para Copo de Algodón, el concierto escénico de David García Hernández, que tuvo lugar en el Castillo de Chapultepec el domingo 1 de junio de 2014, nos generó a los involucrados un dinamismo creativo y el entusiasmo para llevar la historia de Tecuixpo Ixtlacóchitl a todos lugares al soplo del viento favorable.

Ana Laura Delgado, directora de Ediciones El Naranjo, tuvo la gentileza de realizar una serie de fotografías que reflejan toda la emoción de estas flores y estos cantos.

Para albergar esta mirada que tendió Ana Laura sobre la presentación y las huellas que en lo sucesivo iremos dejando, hemos creado el blog




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La poesía puede estremecer los cimientos de una nación: Frank Castell

José Luis Estrada Betancourt
estrada@juventudrebelde.cu
31 de Mayo del 2014 19:35:40 CDT
 
Frank Castell González llegó a la poesía desde muy joven. Era ajedrecista y estudiaba en la Escuela Superior de Perfeccionamiento Atlético (ESPA) de Las Tunas, cuando participó en un taller literario, gracias a su amigo Isael Pérez Campos, lamentablemente fallecido. Ese hecho marcó sus inicios, antes de matricular en el Instituto Superior Pedagógico Pepito Tey. «Un período intenso que recuerdo con satisfacción, porque no fui un alumno excelente, pero supe aprovechar ese tiempo», reconoce.
Tampoco olvida la etapa en que casi todas las tardes iba con Osmany Oduardo a casa de Guillermo Vidal, a conversar sobre los proyectos, las preocupaciones y los demonios que acechan al escritor. «Guillermo se convirtió en un padre, por eso la mejor manera de rendirle homenaje es asumir con responsabilidad todo cuanto escribo, porque la vida está llena de tristeza. De hecho, mis poemas son una coraza para vencer el olvido del presente». Y para demostrarlo, ahí está su más reciente poemario Salmos oscuros, que vio la luz en la pasada Feria Internacional del Libro y que acaba de presentarse en la VI Jornada literaria Orígenes, que organiza la Asociación Hermanos Saíz de Contramaestre, en Santiago de Cuba.
—Por un buen tiempo estuviste muy al acecho de concursos literarios. ¿Valió la pena?
—Cuando se es joven y se busca atraer la mirada de críticos e instituciones, los concursos ofrecen la oportunidad de darse a conocer e ingresar a la Asociación Hermanos Saíz. Durante los años 90 del pasado siglo, era casi la única manera de publicar. De modo que concursé y alcancé algunos premios nacionales, mientras en Las Tunas se me abrieron las puertas a las publicaciones.
«Los premios no son un medidor de la calidad de un escritor, pero sí un estímulo para continuar trabajando. En la actualidad apenas concurso, porque cada día es más difícil salir victorioso de las modas de este tiempo. Me horroriza el nivel de cabildeo que existe y la desventaja de los que estamos fuera del circuito de vencedores que prevalece ahora. Soy poeta que escribe lo que siente y padece. No someto mi obra para ganar un premio. Para mí el reconocimiento mayor es el aplauso o la llamada de alguien que no conozco, pero que se identifica con mi poesía».
—Tienes cinco libros publicados y apareces en más de 15 antologías nacionales e internacionales. Entonces, el fatalismo no te ha afectado tanto pese a vivir en Puerto Padre. ¿Qué le debe tu obra literaria a esa tierra?
—Puerto Padre constituye un municipio con una tradición cultural muy grande. Es la tierra de Emiliano Salvador, Juan Pablo Torres y Enrique Peña, por solo citar a tres figuras importantes. Aquí nacieron mis proyectos literarios motivados por el distanciamiento de los círculos «de poder»: dígase viajes al exterior, eventos importantes, acceso a la promoción. Llevo diez años en este lugar escribiendo como un desesperado náufrago, porque tengo un compromiso con el tiempo, y mi obra es testimonio de este país. En los pequeños pueblos de Cuba se viven intensas historias, conflictos más trascendentes que en La Habana o en cualquier otra ciudad.
«Me molesta que directivos e incluso colegas se sorprendan al escuchar mis textos o los de otro autor de esta zona. No hay necesidad de que esto suceda si existiera la promoción adecuada. Una vez lo dije en la capital: “soy de Las Tunas, un lugar lejano de La Habana, pero muy cerca del mundo”. El fatalismo no me ha afectado de forma tan directa porque trabajo y leo, y no siento temor a escribir lo que algunos prefieren callar».
—Escribes teatro, narrativa, críticas artístico-literarias, pero el mayor peso de tu creación recae en la poesía. ¿Por qué? ¿Consideras que todavía esta se puede vender?
—La poesía es un género de trascendencia. Durante años la asumo como una voz necesaria. Ahora se está dando un fenómeno en las editoriales cubanas relacionado con el mercado y con publicar lo que vende. Hay algo que no se debe descuidar, y es la promoción del libro. Un libro de poesía se puede vender si se realiza una buena campaña promocional y se buscan los espacios idóneos para su distribución y venta. Se necesita más profesionalidad en las instituciones culturales para lograr un mayor impacto.
«En 2003 tuve la oportunidad de recorrer el país en la gira La Estrella de Cuba, junto a poetas y trovadores. Nos presentamos en muchos lugares. Llenamos parques, teatros, y el público se identificó y compró los libros. Eso dice mucho. Hay que tener cuidado con la palabra “mercado”. Debe existir equilibrio. Hace unos días conversé con el poeta Roberto Manzano sobre este tema, quien me alertó con la mirada puesta en el futuro: “Estoy preparado para realizar autoediciones si en el peor de los casos se impusiera el mercado sobre el arte”».
—Dentro de la poesía, la décima te atrae especialmente...
—Me inicié escribiendo décima y lo agradezco. La décima me ofreció el camino: empezar bien y cerrar el poema de forma contundente. Tuve la suerte de pertenecer al taller literario Cucalambé, que dirigía el poeta Carlos Téllez. Éramos jóvenes que comenzábamos a despuntar: Osmany Oduardo, Jorge Luis Peña Reyes, José Alberto Velázquez, Ray Faxas. Éramos la continuidad de Guillermo Vidal, Ramiro Duarte, Alberto Garrido, Carlos Esquivel, y teníamos unos inmensos deseos de escribir. La décima en los años 90 hizo aportes a la poesía cubana, y Las Tunas era parte de esa revolución, porque confluían autores de todas partes de Cuba como José Luis Serrano, Ronel González, Yamil Díaz, Jesús David Curbelo, Alexis Díaz Pimienta. Pero también estaba un libro tan contundente como Hambre del piano, de Carlos Téllez.
«La décima me enseñó que la poesía es síntesis, es fuerza. Por eso mi primer libro, El suave ruido de las sombras, lo escribí de esa manera. En 2012 cerré el ciclo de la décima con Final del día, una deuda con esos años duros y hermosos del taller literario. Ahora me mueve más el verso libre. En sus “aguas” me siento con mayor seguridad. Pero agradezco, de esos primeros años, la presencia de la décima, el filo implacable de su música».
—Tu más reciente publicación, Salmos oscuros (Editorial Oriente, 2013), ha sido muy elogiada. ¿Cuáles fueron las motivaciones que te llevaron a escribirla?
—Es un libro que nació del dolor y de las preguntas difíciles que me hago todos los días. Preguntas que respondo con la mayor honestidad posible, porque el poeta es un cronista del tiempo que le toca vivir. Lo entregué a la Editorial Oriente y para sorpresa mía fue aprobado. La ilustración de cubierta es de mi amigo, el poeta y artista de la plástica Eduard Encina, un intelectual que asume su obra con valor en un lugar llamado Baire, donde hay más poesía de la que se piensa. El libro se presentó en la Feria Internacional de La Habana y en Las Tunas.
«Son poemas que van a la esencia de la Cuba de hoy. Quien se adentre en sus páginas podrá conocer cómo piensa y sobrevive Frank Castell. Salmos oscuros es mi forma de reafirmar que la poesía, aunque esté en desventaja respecto a otros géneros literarios, y sea vista como que interesa solo a minorías, puede estremecer los cimientos de una nación».
—Igual apareces en Poderosos pianos amarillos. Poemas cubanos a Gastón Baquero, de Ediciones La Luz...
—Ediciones La Luz, en el tiempo que   tiene de fundada, ha asumido una labor editorial interesante. Poderosos pianos amarillos… es una antología que se le «escapó» a La Habana, y eso demuestra que desde las provincias se gestan proyectos atractivos y competentes. Además del homenaje a Gastón Baquero, habían salido dos selecciones con resonancia: La Isla en versos y Todo un cortejo caprichoso. Hay que resaltar que de La Isla… se logró grabar 25 de los cien poetas recogidos en ella y se realizó un audiolibro en el que por suerte estoy. Luis Yuseff y su joven y dinámico equipo de trabajo merecen el reconocimiento de artistas y directivos por llevar a la práctica ideas tan buenas.
—¿A qué le atribuyes que Naufragios, un texto que contiene cinco piezas teatrales, aún permanezca inédito? Bueno, es la suerte que también están corriendo Confesiones de papel (entrevistas y reseñas), Los hijos de Caín (novela), así como Fragmentos de Isla, Caída Libre y Teatro de la noche (poesía).
—Soy en esencia poeta. Respeto mucho el resto de los géneros literarios. Por eso no me molesta que esos textos se mantengan inéditos. Soy muy exigente con mi obra y, aunque me gustaría verlos publicados, prefiero se den a conocer cuando estén creadas las condiciones. Sé que todavía estoy ante los tantos caminos que la literatura dispone para mí. Por ahora me queda la satisfacción de disfrutarlos en silencio desde la soledad de mi casa. El tiempo dirá la última palabra.
—¿Qué sucedió con Los reyes solitarios, aquella novela que escribías sobre el mundo del ajedrez?
Los reyes solitarios es mi deuda con el ajedrez. La comencé a escribir en el año 2003 mientras pasaba por una etapa compleja de mi vida: el divorcio. Fue gratificante, aunque duro, levantarme todos los días a las tres y treinta de la madrugada y caminar varios kilómetros hasta el Centro Provincial del Libro para trabajar hasta cerca de las siete de la mañana. Es un compromiso que tuve con Guillermo Vidal y por razones diversas no pude concretar. Pero sé que pronto estará lista, para que el lector sea parte de esa historia de ficción con elementos de la realidad.
—Coméntame sobre la revista de pensamiento literario Quijotes.
—Esta revista representa el sueño de varios amigos de darle a Puerto Padre ubicación en el mapa cultural del país. Es un proyecto ambicioso que tiene tres números publicados. Ahora está al salir un dossier sobre el erotismo desde diferentes puntos de vista. Comenzamos en formato digital, pero aspiramos a que se imprima y se distribuya por toda la Isla. Estamos en el engorroso trámite de legalización para la búsqueda de apoyo financiero. Sería excelente que cristalizara, porque es una propuesta interesante.
—¿Qué te aportó formar parte, en cierto momento, del proyecto cultural La Isla en el Centro, que organizan el Centro Dulce María Loynaz y el Instituto Cubano del Libro?
—La Isla en el Centro significó ir a La Habana y participar en varias actividades. Resultó grato compartir mis poemas en la librería Fayad Jamís, en el espacio Aire de luz. Una tarde espléndida, porque asistieron muchas personas a escucharnos a María Liliana Celorrio y a mí. También participé en el programa A trasluz, una entrevista con el poeta, narrador y crítico Jesús David Curbelo. Es necesario que los escritores se integren de forma sistemática a la vida cultural de la capital, para que la crítica conozca lo que se escribe más allá de sus muros. Fue una experiencia que me estimuló a continuar esta carrera de fondo que es la literatura.
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Flor y Canto para Copo de Algodón en el Castillo de Chapultepec

  Flor y Canto para Copo de Algodón

Amistad, Celebración y Encuentro



Grecia Sofía, Ana Laura Delgado, David García y Giuliana Vega


Todo se conjuntó ese domingo primero de junio para enmarcar las emociones y el poder misterioso de la música y la poesía. El concierto escénico Flor y Canto para Copo de Algodón, de la inspiración de David García Hernández, se convirtió simple y sencillamente en una comunión. De las palabras con la música, del Castillo de Chapultepec con las montañas, del aire que no era aire sino Ehécatl convocado por las notas de David al piano, por la fe escénica de Giuliana Vega al animar a sus títeres, por la voz prodigiosa de Mariana Lorenzo, que se apoderó de todos los rincones del Castillo.

Con Mariana Lorenzo y el cielo de México

Día de celebración y de magia. Día de amistad y de encuentro. Ana Laura Delgado, directora de Ediciones El Naranjo ascendió a pie la cuesta que lleva el Alcázar. David García, el mago encantado de este cuento verdadero, nos convocó a todos en un castillo para dar voz a una princesa: Copo de Algodón. Antes de dar inicio al comienzo, David nos compartió preciosos detalles del proceso creativo que dio como resultado esta maravilla que es su Concierto.



Vuelve a haber flores. Vuelve a haber cantos. Vuelve a la vida el hermoso jardín de Moctezuma hecho de notas cristalinas e inocentes. Ha vuelto el agua y la gran Tenochtitlan brilla como una joya en la copa del día. Evocar e invocar al gran Moctezuma, a Cuauhtémoc, a Cuitláhuac, volver a vivir la aventura, la pasión del encuentro con los conquistadores españoles.

El Castillo de Chapultepec vibró al compás de nuestros emocionados corazones. Fuimos uno con Copo de Algodón, una sola alma, una sola intención. Una sola, fuerte e invencible esperanza. Del interior del cielo han brotado los cantos y flores de David García, el enorme corazón de México. (MGE)

David García y el pequeño David

"Me gusta mi nombre: Tecuixpo Ixtlaxóchitl"



El público hechizado por la música de David
Giuliana es el alma de la pequeña Copo y el pequeño David

Fotos: 
David García
MGE

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